Ana Laura Cantera 

Inhalaciones territoriales se basa en la captura de las partículas del aire en suspensión a partir de recorridos con una mochila que tiene un sistema de aspiración que permite recolectar el material particulado respirable de la atmósfera. Este dispositivo, que a su vez toma registro de la cantidad de dióxido de carbono presente en el espacio aéreo, es utilizado para hacer recorridos en ciudades y conocer su calidad de aire en tiempo real. La obra implica el uso del cuerpo para los desplazamientos desde dos operatorias: en primer lugar se requiere entrar en la materia porque existe una exposición y puesta ineludible de la propia corporalidad al territorio afectado y su atmósfera; y en segundo lugar, la materia entra en el cuerpo, dado que el usuario consume las partículas en suspensión del contexto en el que se inserta.

La obra está co-gestada con el aire que agencia por temporalidades diversas de agencia humana y no-humana: por el lado humano, está conformada inintencionalmente por los desechos atmosféricos generados por actividades industriales y locomoción de la humanidad moderna en épocas que nos antecedieron y en tiempos contemporáneos. A nivel no humano, la obra también es resultado de las entidades vegetales y fúngicas que liberan productos a la atmósfera para su continuidad y supervivencia. Existe una múltiple agencialidad en tiempos y escalas diversas que problematizan el territorio y a su vez lo constituyen. 

​

El acopio de información de las condiciones atmosféricas se lleva a cabo desde dos metodologías: por un lado, de manera digital, a partir de un sensor de CO2 que permite conocer en tiempo real la cantidad de ese gas en una pantalla en el frente de la mochila como también en otra más pequeña que se encuentra sobre la muñeca del usuario; y por el otro, de manera analógica a partir de discos de micelio (biocompuesto de hongo) que el dispositivo posee en su interior y que funcionan como superficie de depósito de las micro y macropartículas aéreas aspiradas. La mochila absorbe los tóxicos gaseosos mediante mecanismos técnicos análogos al acto de respirar, simulando la inhalación orgánica que produce una impresión en la superficie biomaterial similar a la producida sobre nuestros órganos en los territorios afectados, y a su vez en el cuerpo de quien traslada la mochila. El cuerpo se convierte en un dispositivo de registro y memoria de lo que acontece en territorio. 

​

Mediante los recorridos los discos toman diferentes tonalidades grisáceas por acumulación y yuxtaposición mediante la repetición y persistencia de la acción del caminar con el dispositivo. Cuando más se recorre el territorio, más oscuras y heterogéneas se tornan las huellas en el micelio, y más conflictos geopolíticos se recolectan.

​

​

- Versión Buenos Aires - 

​

La primera versión fue realizada pre-pandemia para conocer el aire de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano sur de Buenos Aires. El sistema de absorción fue mediante embudos y ventiladores que aspiraban los gases y partículas aéreas del ambiente. Durante los casi dos años de caminatas y recorridos en bicicleta con el dispositivo, los filtros de micelio teñidos fueron utilizados para la realización de un “cianómetro”, un dispositivo creado en el siglo XIX para conocer cuán azul podía ser el cielo pero en este caso contemporáneo: un instrumento poético para saber cuán gris/cuán contaminada puede estar nuestra atmósfera.

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

- Versión Bangalore - 

​

La segunda versión fue realizada para la muestra Carbon de la Science Gallery Bengaluru, India. La nueva versión tenía como objetivo almacenar la mayor cantidad de partículas urbanas respirables en pocos días de caminata debido al reducido tiempo que duraba el viaje a la ciudad asiática. El sistema fue optimizado mediante un dispositivo más potente y directo sobre los discos de micelio para que se puedan visualizar rápidamente las zonas grises de la persistencia de la recolección. A su vez, fue colocada en el frente de la mochila una pantalla que transmitía en tiempo real la curva de incremento o reducción de la cantidad de CO2 presente en la atmósfera, para que los transeúntes pudiesen observar la información al momento de interactuar con el dispositivo. En la muestra también están expuestos los recorridos realizados por Bangalore mediante mapas en los que pueden visualizarse las cantidades recolectadas en partes por millón. Se puede ver online aquí: https://carbon.scigalleryblr.org/

​

​

​